Luces y sombras sobre el Mar Rojo

En esta ocasión ponemos el foco en Oriente Medio y, concretamente, en:

• Claves del enfrentamiento entre Israel e Irán
• El impacto (real) que la crisis en el Mar Rojo está teniendo sobre el comercio global
• Así es como algunos barcos tratan de evitar los ataques hutíes
• El curioso apoyo de Sri Lanka a la operación estadounidense en el Mar Rojo

Irán e Israel: una guerra que sale de la sombra 

La respuesta de Israel a los más de 300 drones y misiles lanzados desde Irán el sábado por la noche ha sido, tal y como lo fue el ataque iraní, comedida y sin mayor pretensión que la de no quedar mal con la opinión pública interna.

¿Las principales conclusiones? 

(1) Nadie quiere ir a la guerra. De otra forma Irán no hubiese avisado del inminente ataque y este se hubiese dirigido a objetivos mucho más importantes para Israel, se hubiese utilizado todavía más armamento para impedir que la cúpula de hierro israelí y el sistema Arrow pudiesen sofocar el ataque y se hubiese utilizado armamento más rápido y menos fácilmente detectable.

(2) Además, las declaraciones de relevantes dirigentes de la República Islámica dejaron muy claro que con este ataque daban por finalizado el choque con Israel que se provocó a raíz del ataque israelí contra el complejo diplomático iraní en Damasco. De lo contrario, la respuesta israelí también hubiese sido mucho más contundente, tal y como exigían alguno de los socios más radicales de Netanyahu.

“No tenemos intención de continuar la operación contra Israel. La Cúpula de Hierro no ha podido contrarrestar nuestra operación de manera significativa. Consideramos que esta operación ha alcanzado sus objetivos y ha terminado.” Mohammad Bagheri, jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de la República Islámica de Irán.

(3) Estados Unidos sigue teniendo influencia en el estado hebreo. Desde que Irán lanzó su ataque, Washington ha estado tratando de evitar una respuesta inmediata y a gran escala que habría hecho casi imposible evitar una espiral de guerra. Tras la respuesta israelí de la madrugada del viernes podemos decir que lo ha conseguido. Eso sí, es probable Bibi haya sacado algo a cambio (que Estados Unidos no se oponga al ataque de Rafah).

(4) Supone un paso clave para la salida de las sombras del conflicto entre Irán e Israel. Hasta ahora el conflicto ha estado materializado por acciones en terceros países o a través de proxys. Sin embargo, tras este último choque el umbral para respuestas futuras se ha elevado.

(5) Benjamin Netanyahu obtiene un respiro. No sabemos cuánto durará, pero la situación generada por el ataque iraní le ha dado un respiro al primer ministro israelí, que está sufriendo enormes presiones y críticas tanto dentro como fuera de casa.

El impacto (real) de la crisis en el Mar Rojo sobre el comercio global

El secuestro del buque Galaxy Leader por parte de los rebeldes hutíes en el estrecho de Bab-el-Mandeb dio inicio a un aumento de las hostilidades dirigidas hacia los buques comerciales de occidente. A pesar del despliegue de la operación liderada por Estados Unidos, conocida como Prosperity Guardian, y la operación europea recién anunciada, parece que por ahora no se ha logrado frenar el número de ataques. Desde el 19 de noviembre, se han registrado un total de 64 ataques.

Las consecuencias de estos ataques se han reflejado claramente en el número de buques y el volumen de tránsito comercial que atraviesa el Canal de Suez, cuya diferencia con el año anterior ha ido ampliándose desde el primer ataque de los hutíes. Mientras que durante la semana anterior al 19 de marzo de 2023 transitaban el canal una media de 75 buques comerciales, este año ese número ha descendido a 33, es decir, un 56 % menos. Respecto al volumen de tránsito, la caída ha sido aún mayor en este mismo período de tiempo, alcanzando el 65,6 %.

Esto se debe a que la gran mayoría de los barcos que solían pasar por el Canal de Suez han modificado su ruta y ahora se desvían hacia el sur de África, por el cabo de Buena Esperanza.

Número de buques comerciales transitando por el Canal de Suez (número de barcos)

Volumen de tránsito comercial por el Canal de Suez 
(en toneladas métricas)

Por supuesto, estos desvíos no salen gratis, están provocando aumentos tanto en los tiempos medios de entrega como en los costes de transporte de los contenedores. Con todo, la situación sigue siendo mucho mejor que la vivida tras la pandemia, cuando se registraron enormes problemas con las cadenas de suministro a nivel global.

Evolución mundial de los precios de los contenedores 
(del 1 de diciembre de 2023 a 15 de marzo de 2024)

A primera vista, parece que las interrupciones causadas por los ataques de los hutíes en el comercio global están siendo por ahora limitadas, especialmente en comparación con la situación experimentada tras la pandemia.

Sin embargo, el optimismo debe ser moderado. Aunque aún no se ha confirmado si son responsables de los daños sufridos por varios cables subterráneos, en ocasiones anteriores han amenazado con dirigir sus ataques hacia este tipo de infraestructuras. Recientemente, además, han amenazado con ampliar el área de ataque para perseguir a los barcos que se desvían hacia el sur de África adentrándose en el océano Índico. Y, desde luego, a juzgar por los últimos acontecimientos regionales (el ataque iraní sobre Israel y la posterior respuesta del estado hebrero), en el corto y medio plazo, no parece que la región se dirija hacia una desescalada de violencia. 

Así es como algunos barcos tratan de evitar los ataques hutíes

Para evitar el epicentro de los ataques de los hutíes, muchas compañías navieras no solo están desviando sus embarcaciones por el cabo de Buena Esperanza. Otras también están tratando de buscar alternativas terrestres. Este es el caso de algunas empresas de Israel, que además es el país cuyos buques enfrentan mayores peligros.

Israel está transportando mercancías por tierra a través de la ruta que conecta puertos como el de Haifa o Eilat con el de Jebel Ali en Emiratos Árabes Unidos o el de Mina Salman en Baréin a través de Arabia Saudí y Jordania. Las empresas encargadas de los traslados por tierra incluyen a la israelí Trucknet, la emiratí PureTrans, la bahreiní Logistics WLL y la egipcia WWCS. Se trata de un ejemplo más de cómo han avanzado las relaciones entre los signatarios de los Acuerdos de Abraham en los últimos años, a pesar, incluso, del estallido de la guerra en la Franja de Gaza.

Con todo, el tránsito naval por el Mar Rojo no se ha detenido por completo. Algunos países y algunas compañías que no están desviando sus barcos han recurrido a las señales del Sistema de Identificación Automática. Este sistema se utiliza en navegación marítima para rastrear la ubicación de las embarcaciones y para indicar que no están afiliadas con Israel. En esta línea, son especialmente comunes mensajes como “All Chinese Crew”, “All Chinese”, “Chinese Owner Cre” o “No Contact Israel”.

¿Por qué tantas referencias a China? Pues es que al parecer existe un acuerdo al entre las autoridades chinas y rusas con los representantes de los hutíes para permitir que sus barcos naveguen por el golfo de Adén y el Mar Rojo sin ser atacados. Sus relaciones son razonablemente buenas y de hecho, a principios de enero, tanto Rusia como China se abstuvieron en la votación de una resolución promovida por los Estados Unidos y Japón que condenaba los ataques de los hutíes a los barcos.

Pese a ello, no está claro que este acuerdo esté funcionando muy bien, pues hace apenas unas semanas un barco con bandera panameña, pero de propiedad china y operado por chinos, fue atacado por varios misiles hutíes. 

Comunicado de Estados Unidos informando de un reciente ataque con mísiles de los hutíes a un buque chino.

El curioso apoyo de Sri Lanka a la operación estadounidense Prosperity Guardian 

El anuncio de la operación multinacional de seguridad Prosperity Guardian por parte de Estados Unidos en diciembre ha generado diversas reacciones en la comunidad internacional. No todos los aliados tradicionales han recibido la noticia con el mismo entusiasmo. En la Unión Europea, en particular, ha habido divisiones internas respecto a su adhesión a esta iniciativa. 

En medio de estas discusiones, el presidente de Sri Lanka anunció la posibilidad de que la marina de su país se una a las fuerzas occidentales en el Mar Rojo, convirtiéndose así en el único país asiático, junto con Singapur, en hacerlo.

El transporte marítimo se ha visto interrumpido debido a los ataques de los Houthi a los buques en el Mar Rojo. Para contrarrestar esta situación, si los buques desvían su ruta alrededor de Sudáfrica en lugar de navegar por el Mar Rojo, aumentarán los costes de la carga. En respuesta, se ha tomado la decisión de desplegar un buque de la Armada de Sri Lanka en el Mar Rojo, contribuyendo así a la seguridad de la región frente a las actividades de los Houthi." Ranil Wickremesinghe, presidente de Sri Lanka

Este anuncio se produjo después de que Sri Lanka se convirtiera en el miembro número 39 de las Fuerzas Marítimas Combinadas, lideradas por Estados Unidos, que operan en Oriente Medio. 

Y aunque aún no se ha llevado a cabo ningún despliegue, el anuncio ha generado sorpresa en Sri Lanka. Especialmente por los costos asociados a una operación de esta magnitud. Según el presidente, desplegar un barco en el Mar Rojo podría costar alrededor de 250 millones de rupias (unos 775.000 dólares estadounidenses) cada dos semanas. Y si bien no parece mucho dinero, el anuncio llega en un momento muy delicado para un país que lleva dos años de crisis y recesión y cuando apenas está empezando a recuperarse.

Sri Lanka, el amigo de todos

Este país ha sido capaz de mantener buenas relaciones con muchos actores internacionales, incluyendo a Irán - el principal patrocinador de los hutíes - a Fatah y la Autoridad Palestina - Históricamente, este país se ha mostrado muy cercana con la causa palestina —, a Estados Unidos e, incluso a Israel. 

A inicios de los 2010, Irán era de hecho uno de los principales socios comerciales de Sri Lanka y en la actualidad sigue siendo uno de sus principales compradores de té, un producto muy importante para la economía de la isla. Incluso recientemente el gobierno esrilanqués ha usado el té para saldar una parte de la deuda contraída por Sri Lanka con la República Islámica por la compra de petróleo en 2012, saltándose así las sanciones occidentales. 

Una creciente ¿y coherente?, alianza con Occidente  

El acercamiento a Occidente es cada vez más evidente. Estados Unidos es el principal socio comercial de Sri Lanka, siendo el destino principal de sus exportaciones. Su ayuda, además, ha sido clave en la recuperación del tsunami que asoló la isla en 2004. Asimismo, es uno de los principales países que han contribuido a dotar de barcos y guardacostas a la marina esrilanquesa, junto con Israel, Australia, la India y China, así como de capacitar a sus marines.

En la misma línea, en los últimos años y pese a su histórica simpatía con la causa palestina, Sri Lanka ha firmado acuerdos con Israel para proporcionar trabajadores esrilanqueses en sectores como los cuidados, la agricultura o la construcción. De hecho, en 2022 representaban el 4 % de la fuerza laboral extranjera presente en Israel.

Ahora, participar en una operación militar internacional liderada por Estados Unidos no solo supondrá un acercamiento todavía mayor a Occidente, sino también que también representará ir un paso más allá de su histórica neutralidad. 

Sobre la situación actual en Oriente Media y la posibilidad de un conflicto directo entre Estados Unidos e Irán os hemos hablado recientemente en VisualPolitik: